Cerca de 300 agentes de élite de la Policía Federal asumieron el control de las casetas de inspección de las dos vías de acceso a Cancún desde la Península de Yucatán, como parte del programa federal de “sellamiento” a delitos de alto impacto en ciudades con graves problemas de inseguridad.
De acuerdo a autoridades locales, además de este grupo policiaco, la incorporación de elementos ronda los mil uniformados, con lo que se pretende generar una línea de acción que espera arroje buenos resultados.
La llegada de los elementos federales se registra luego de un año muy complicado para las corporaciones policiacas con diferentes agresiones por parte de la delincuencia, el último ataque se registró el 17 de enero del 2017 en contra de la Vice Fiscalía General de Justicia.