Este fin semana Michoacán volvió a vivir un episodio sangriento de gran magnitud, el mayor que lo que val del año, tal vez el mayor en varios meses, luego de que fue localizado un vehículo con los 15 cadáveres en la carretera que conecta la comunidad de Aquila con el puerto de Lázaro Cárdenas, en la costa del Pacífico. Lo peor, se trataba de una patrulla falsa de la Secretaría de Marina.
De acuerdo a la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, existen elementos para suponer que los 15 hombres asesinados en Aquila eran miembros de un grupo criminal liderado por Fernando Cruz Mendoza, ‘El Tena,’ exlíder de Los Caballeros Templarios en la regional Costa-Sierra del estado.
De acuerdo a distintos analistas, en Michoacán actúan remanentes de cárteles de las drogas que habían sido desmantelados por las autoridades y pugnas internas pero que se han ido reorganizando en los últimos dos años, principalmente por su colindancia con Guerrero y ser punto medular en la producción y tráfico de marihuana, goma de opio y drogas sintéticas.
Justo a inicio de mes, la zona de Tierra Caliente ya había dado aviso de la fuerza del crimen organizado al desatar distintos enfrentamientos con autoridades y montar bloqueos, con decenas de vehículos incendiado.