El envío de cocaína por el Océano Pacífico aumentó de 2016 a abril pasado en más del 800%, en comparación con los primeros tres años de la actual administración. Entre 2013 y 2015 Secretaría de Marina-Armada de México interceptó en el mar 2.6 toneladas de esa droga, procedente de Centro y Sudamérica.
Para el periodo 2016 a abril de 2018, los aseguramientos se incrementaron en 823 por ciento al detener el flujo de 24 toneladas de cocaína, principalmente en altamar, de acuerdo con datos la institución.
Fuentes de la dependencia aseguraron que en los últimos dos años el crimen organizado modificó la estrategia en el envío de cocaína a México y evitó el envío de esa droga por contenedores en barcos de altura, por un envío a mayor escala, también vía marítima, pero mediante cargamentos arrojados al mar con sistemas rastreadores.
Los paquetes sellados con cocaína han sido lanzados desde avionetas o buques a entre 90 y 150 millas de los puertos de Chiapas y Guerrero, principalmente.
De acuerdo con este esquema, los cargamentos, de hasta dos toneladas, son «rescatados» por embarcaciones para el «arrastre» de la cocaína a islotes o tierra firme.
Por primera vez en este tipo de operaciones, la Marina realizó el 10 de abril una persecución de una de estas embarcaciones, tipo «Go Fast» que transportaba 67 bultos con una tonelada de cocaína. La embarcación menor fue detectada vía aérea de manera previa.
El hecho se reportó a 165 kilómetros de las costas de Acapulco, con cinco presuntos narcotraficantes detenidos. Ante el aumento del tráfico de cocaína por el Pacífico, la Marina proyecta la adquisición de ocho helicópteros navales MH-60R Seahawks artillados por mil 200 millones de dólares.
El Gobierno de México solicitó a EEUU los helicópteros para realizar misiones de guerra antisubmarinas y misiones secundarias, incluyendo búsqueda y rescate.
«México ha sido un fuerte socio en el combate al crimen organizado y a las organizaciones de tráfico de drogas. La venta de estas aeronaves a México va a incrementar de manera significativa sus capacidades marítimas», señaló la Agencia de Cooperación en Seguridad y Defensa (DSCA, por sus siglas en inglés) del Gobierno de EU al Congreso estadounidense respecto a la compra.
Ahora proyecta complementar sus operaciones con helicópteros navales, ante el aumento de envíos de cocaína por el Pacífico.