José Efraín Ríos Montt, general de brigada y ex dictador de Guatemala, falleció este domingo a los 91 años de edad.Tras su dictadura militar, fue considerado uno de los dictadores más sanguinarios de América Latina, a 21 años de la paz en la guerra civil en ese país.
Nacido en Huehuetenango el 16 de junio de 1926, Ríos Montt se crió en un entorno rural y en 1943, con tan solo 17 años, empezó la carrera de armas en el Fuerte de San Rafael de Matamoros para luego ingresar como cadete en la Escuela Politécnica, en San Juan Sacatepéquez, al norte de la capital.En 1950 se graduó como militar y académico de oficial de Infantería y maestro de Caminos.
Posteriormente cursó una especialización en Fort Gulick, en el área del Canal de Panamá, regido por los EEUU. En enero de 1973 alcanzó el grado de general de brigada y le fue conferida la jefatura del Estado Mayor General del Ejército guatemalteco. Dos meses después renunció a sus galones militares para contender por las elecciones presidenciales de 1974, donde fue derrotado.
Desde ese año fue uno de los protagonistas principales de la vida política de Guatemala. Destacó como militar de línea dura, pastor evangélico-fundamentalista, líder político con eternas aspiraciones presidenciales y ejecutor de la brutal represión desatada por las Fuerzas Armadas durante los años más cruentos de la guerra interna que vivió Guatemala entre 1960 y 1996.
El 23 de marzo de 1982 integró la Junta Militar del Ejército que por medio de un golpe de Estado derrocaron al entonces presidente, el general Fernando Romeo Lucas García. Durante los 17 meses que Ríos Montt gobernó de facto el Ejército, perpetró más de 250 matanzas colectivas de indígenas, en las que murieron más de 25 mil personas.
Tres meses después, disolvió la Junta Militar y se autoproclamó Jefe de Estado, presidente de la República y Comandante General del Ejército, un cargo en el que una de sus primeras medidas fue poner en marcha los Tribunales de Fuero Especial. En ellos, los jueces, con el rostro cubierto, condenaron a muerte a 16 personas, y obligaron a los indígenas a integrar grupos paramilitares de control y represión.
El 8 de agosto de 1983 Ríos Montt fue derrocado por un golpe de Estado encabezado por su entonces ministro de la Defensa, Óscar Humberto Mejía Víctores, quien gobernó el país hasta enero de 1986, cuando se instauró la democracia.
El 10 de mayo de 2013, fue condenado a 80 años de prisión al ser encontrado culpable de la muerte de mil 771 indígena ixiles del departamento noroccidental de Quiché a manos del Ejército durante su régimen de facto, una decisión que el Constitucional anuló por irregularidades.
De ahí se inició un nuevo proceso, a puerta cerrada y sin posibilidad de condenarlo a prisión por su demencia senil, causa de su muerte.