A 17 días de la explosión ferry de la empresa Barcos Caribe en Playa del Carmen, investigaciones oficiales encaminan a que se trata de un atentado, cuyo modus operadi se relaciona con un sistema a control remoto para provocar la detonación.
Según el periodista Carlos Loret de Mola, expertos de la Secretaría de Marina (Semar) y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) confirmaron que alguien colocó de manera intencional un artefacto explosivo que estaba conectado a receptor de señal inalámbrica.
Dentro de la embarcación, los especialistas encontraron restos de PVC y cartuchos conectados a un cable amarillo. También localizaron el sistema de iniciación y una alimentación eléctrica de metal.
Días después, 1 de marzo, fue hallado supuestamente otro artefacto con características similares, que fue desactivada.
Mientras se desarrolla la investigación sobre los autores de este atentado, las autoridades temen réplicas de este método en otros puntos del país, lo que significaría un impacto a una de las actividades principales del país, como es el turismo.
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