De acuerdo con el registro de Agencia Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés), durante 2011 y 2016, se contabilizaron 106 mil armas provenientes de Estados Unidos y que estuvieron vinculadas con crímenes en México.
Según los datos del Center for American Progress, el 70%, (74 mil 200), fueron compradas legalmente en territorio estadounidense, según el rastreo realizado por la ATF.
Sin embargo, datos no oficiales estiman que el mercado negro de armas está muy por encima de esos números, y se calcula que cerca de 213 mil armas de fuego son transportadas ilegalmente a nuestro país.
El dato más alarmante es que cerca de la mitad de las armas provenientes de Estados Unidos e involucradas en casos criminales, son armas largas, lo que incluye rifles semiautomáticos, como los utilizado por el crimen organizado.