El presidente de EEUU, Donald Trump, regresó este miércoles a Washington DC, tras participar en la cumbre con el líder norcoreano Kim Jong-un, en Singapur, con un resultado favorable para el planeta, pues aseguró que ha concluido con la «amenaza nuclear» que representaba ese país.
El avión presidencial, el Air Force One aterrizó en la base aérea de Andrews, en las afueras de Washington, y el mandatrio saludó mientras bajaba del avión, donde estuvo publicando mensajes en Twitter:
«Ya no hay más amenaza nuclear de Corea del Norte. La reunión con Kim Jong-un fue una experiencia interesante y muy positiva. Corea del Norte tiene gran potencial para el futuro», aseguró.
«Antes de que asumiera la presidencia las personas creían que iríamos a la guerra con Corea del Norte. El presidente (Barack) Obama decía que Corea del Norte era nuestro más grande y peligroso problema. Ya no más. Duerman bien esta noche!», agregó.
Ahorramos una fortuna al no hacer juegos de guerra, siempre y cuando negociemos de buena fe», concluyó.
Más allá de la gran repercusión mediática de la cumbre, sus resultados tangibles, especialmente sobre el tema clave de la desnuclearización, dejan dudas entre los expertos, pues según analistas, la declaración común firmada por ambos países, es vaga y repite compromisos asumidos anteriormente por Norcorea, que nunca fueron puestos en marcha.